jueves, 31 de mayo de 2012

Otoño

Es el último de la serie, el otoño. ya os he comentado que mi padre me los compró para su despacho, o mejor dicho, para la oficina. Al poco tiempo de llevárselos, mi padre murió. Tenía yo 15 años y él 45. Siempre he pensado que fue injusto, ya no sólo por mí, o por mi madre o mis hermanos, no, en este caso es por él. Era un hombre vital, que amaba la vida, que la disfrutaba, y lo que es mejor, que sabía hacer que los demás la disfrutaran. Somos cinco hermanos, y cuando alguna vez hemos hablado de cómo nos sentíamos con respecto a mi padre, descubrimos que todos creíamos ser su favorito. Conseguir eso con cinco hijos no es fácil.

Pero la vida es como es, y no la podemos cambiar, por mucho que lo deseáramos.


No hay comentarios:

Publicar un comentario